UN CUENTO

Érase una vez, un Universo oscuro, un Universo negro, un Universo helado y matemático.

No se sabe por qué, dos estrellas se miraron y se enamoraron.

Tan grande y hermoso fue su amor, que dejaron de describir inefables órbitas alípticas, para dibujarse tiernos corazones entrelazados.

¡¡Se querían tanto!! Pero la distancia era tan grande, que no podían acariciarse, ni besarse. ¡¡Si por un solo instante pudieran estar juntas!!

Pero eso estaba prohibido en un Universo oscuro, en un Universo negro, en un Universo helado y matemático.

Aun asi, no se resignaron a vivir separadas, alejadas por un denso y silencioso vacío; así que decidieron quebrantar la eterna ley del perfecto y ordenado Universo. Con un cómplice guiño, se salieron de sus órbitas, convirtiéndose en dos estrellas fugaces, dirigiéndose a un mismo destino a la velocidad del deseo y del cariño.

Solo querían besarse, sabían que ése sería su primer y último beso, pero a pesar de ello, continuaron vertiginosas su sendero suicida... Hasta que se encontraron, fundiéndose en un luminoso y bello abrazo de AMOR Y MUERTE.

Fue el precio que tuvieron que pagar por quererse en un Universo oscuro, en un Universo negro, en un Universo helado y matemático.

Ellas fueron las primeras, pero si alguna noche de verano, mirando al cielo, ves una estrella fugaz, piensa que en algún lugar hay otra, que están enamoradas y que aunque vivamos, en un Universo oscuro, en un Universo negro, en un Universo helado y matemático, lograrán encontrarse, se besarán por un instante nada más y desaparecerán entre destellos de AMOR Y TERNURA.


sábado, 14 de marzo de 2009

¿Sabes?



¿Sabes?...
No creo que lo sepas, pero siempre estoy ahí, en cada suspiro tuyo.
¿No me recuerdas?
Soy la que te espera cada noche, aunque sea lluviosa y tormentosa... pero es la que siempre está ahí para ti... Aunque tú no puedas estarlo...
¿Te amo, lo sabes?
Como desearía ver por última vez esa alegría en tu rostro, esas mejillas ruborizadas por el frio, y por aquel calor que mi cuerpo emane al sentir el tuyo...
¿Acaso, me has olvidado?
No te culpo, siempre estuve ahí, pero nunca me atreví a mirarte a los ojos y decirte... "estoy aquí, solo para ti, fui creada para ti... pero sin querer he pecado... me he enamorado de ti"...
¿Que me dirías?
Tal vez muchas cosas que no desearía escuchar de tu boca, de esos labios que tanto desee cada atardecer... que me dijesen “¿y tu quien eres?, pero...
¿Alguna vez pensaste en mí?
Eso es lo que mi mente desea creer, lo que mí corazón desea pensar... para no sentir más este dolor... este dolor que siento, al saber, que tu, mi dulce tentación, no volverá a estar mas...
¿Como fue que te deje ir?
Es lo que me culpo cada noche, cada existencia... de esta vida sin alma, de estos falsos recuerdos, de aquella vez que te veía correr, pero nunca podía alcanzarte. Te necesito... ahora más que nunca... como fue, que con un solo suspiro, siento que te alejas cada día mas de mi... te vas... y te vas... y no puedo hacer nada.
¿Estarás escuchándome?
Susurro palabras de aliento, para poder darle algún significado a esto que llaman vida... ya que la mía sin ti... es solo la nada... que está llena de recuerdos falsos, los cuales el tiempo me hizo creer, y el cual… se los llevo el viento…
¡Te esperare!
Aunque mi alma desaparezca por completo, estaré ahí, esperando tu regreso, el cual se perfectamente que no llegara, pero es una manera de mentirle a mi corazón, para que me de unos segundos más de vida, para contemplar lo único que me queda de ti… Un sueño imposible

No hay comentarios: